Es un cachorro, no un jersey

Uno de los regalos más solicitados por los pequeños de la casa, suele ser un cachorrito. Hay que reconocer que son absolutamente adorables y achuchables, pero son seres vivos y no se pueden cambiar ni hay política de devoluciones para ellos.

Que los Reyes Magos o Papá Noel traigan uno, hace que los pequeños se iluminen de ilusión y se convierten en el centro de atención. Pero ojo... regalar un cachorro es un compromiso de por vida con ese ser, no son un juguete que dar para que los niños se ocupen, porque está claro que por mucho que nos prometan que ellos se encargarán de cuidarles, los que finalmente seremos responsables somos nosotros los padres.

Esos cachorritos son preciosos y tiernos, pero al igual que todos los bebés de cualquier especie, crecerán y envejecerán. Al principio como cualquier bebé, es un gran explorador y está aprendiendo a interactuar con su entorno. Harán mil y un travesuras, pero ten por seguro que no es por fastidiar, son BEBÉS.

Como no pueden llevar pañales como nuestros bebés, harán todo por todas partes y luego sus dientes les molestarán y morderán lo que encuentren en su camino. De nuevo hay que ser comprensivos, vuelve a recordar que es un BEBÉ. 

¿Dejarías a tu hijo pequeñito e indefenso tirado y sólo, para irte de vacaciones? Evidentemente no, pues con el animal con el que te comprometes tiene que ser exactamente la misma respuesta que si fuera tu hijo.

Para aceptar un bebé de 4 patas en un hogar, primero hay que hacerse todas las preguntas adecuadas y comprometerse a estar en el resto de su vida, porque ten por seguro que él te querrá y estará a tu lado en el resto de la suya.

Las mascotas en casa aportan alegría, respeto hacia los animales, fortalecen el sistema inmune de nuestros hijos y aprenderán el ciclo vital de los seres vivos.

Antes de comprar una vida, informaros de animales que esperan ser adoptados, seguro que alguno estaría encantado de formar parte de vuestro hogar. 

Es un cachorro, no un jersey, llegará a tu casa como una mascota pero se conviertirá en tú familia.

PALABRA DE ABUELA: No te PRE-ocupes

Recuerdo el momento exacto en el que me dí realmente cuenta de que era madre, no fue cuando le oí llorar, ni tampoco cuando lo tuve en mis brazos por primera vez, lo que tardó 2 días en suceder, ya que fue cesárea y el se quedó en observación. Curiosamente fue una enfermera la que con unas sencillas palabras me hizo realmente sentir todo el peso de la maternidad. Al tercer día de nacer, al fin lo dejarían conmigo en la habitación y cuando lo trajo le pregunté: -¿ya se queda conmigo?
A lo que ella respondió: - ¡Para tí, para siempre!
El corazón me dió un vuelco y ahí, me sentí madre, responsable para siempre de aquel adorable y pequeñito ser. Era magia en estado puro. Ese instante fue sólo nuestro, yo estaba sola en la habitación y las emociones inundaron todo mi ser. ¡Era increíble! pero a la vez, me entró un miedo atroz. Los mil y un "y si..." me embargaron.
¿Y si no lo hago bien?
¿Y si no le doy lo que necesita?
¿Y si llora qué hago?
¿Y si no me quiere?

¿Y si.....? una interminable lista llenaba mi mente, mientras los minutos pasaban y ese precioso bebé en mis brazos me miraba y al encontrarme con su mirada, me dí cuenta que no tendría que aprender sóla a ser mamá, porque el venía a enseñarme como serlo y aprenderíamos juntos. No sería perfecta, pero estaba dispuesta a dar todo de mí para que ese bebé, MI HIJO, siempre sintiera que yo estaba ahí.
Pasaron los años y ese lindo bebé ahora tiene 11 años, los "ysis" se han sucedido, pero los hemos ido superando uno a uno.
Gracias a la santa-abuela en muchas ocasiones no he llegado a entrar en modo pánico, porque cuando estoy al borde de "ysis" ella siempre me dice:

- Deja de PRE-ocuparte. Ocúpate de los problemas cuando lleguen, no te agobies antes de tiempo, que la mayoría de los "ysis" ni siquiera llegan a ser problemas.

Este consejo no sólo es aplicable a padres, sino a todos. Solemos estar tan PRE-ocupados que no vivimos el presente y sólo vemos el lado negativo del futuro.
Hay que dejar que la vida fluya y atajar los contratiempos cuando se presenten, porque los "ysis" y las PRE-ocupaciones, nos hacen vivir con temor al futuro.
Vida sólo tenemos una y es para vivirla con alegría. Siempre sucederán cosas, pero con una actitud positiva superaremos cualquier obstáculo

PALABRA DE ABUELA

Queridos reyes magos...

Este año he sido muy buena...

He jugado con mis hijos, los he cuidado a ellos y nuestro hogar.
Me he despertado por las noches todas las veces que me han necesitado.
Me he preocupado de hacer sus comidas preferidas pero también las que les gustan menos pero alimentan más.
He trabajado duro pero también he encontrado tiempo para mi familia.
He procurado darles buenos consejos y no enfadarme demasiado cuando hacen oídos sordos.
Este año hasta he creado una vida.

Como veis me he portado muy muy bien y me gustaría pediros algunas cosas si podéis.

PORFI, PORFI, PORFIIIIII

• Domir una noche del tirón.
• Un traductor de voz para que mis hijos me entiendan.
• Una tableta de chocolate que queme calorías.
• Una máquina que ponga el chupete por la noche.
• Tiempo para poder disfrutar de familear.
• Y para finalizar, una hora extra cada día para mi solita .

A cambio os dejaré mis ojeras que si no es molestia os las podéis llevar y unos kilitos de más para quien le haga falta, que yo soy muy de compartir.

Gracias por leer mi carta, espero no haberos robado mucho tiempo.

Un abrazo enorme

Mamá 

PD. Este año mis hijos se han portado bastante regular, aunque ahora parezca lo contrario, pero si puede ser, no les traigáis carbón que el dentista está caro ¡gracias!

Memoria de pez

La naturaleza es sabia, si no como es que nos aventuramos a tener más de un hijo....
Pues con memoria de pez.

La naturaleza es sabia, si no como es que tras toda una noche sin dormir, ese pequeño ser que nos arrebata el sueño, nos hace sonreír...
Pues con memoria de pez.

La naturaleza es sabia, si no como es que cuando el agotamiento nos hace enfadarnos con nuestros peques, un minuto más tarde los abrazamos...
Pues con memoria de pez.

Porque hay que dejar espacio para lo que merece ser recordado.

Ver a tú bebé por primera vez.

Los besos en sus mofletitos.

Su olor tan especial.

Ver sus logros.

Oír su voz.

Definitivamente la naturaleza es sabia, nos deja atesorar los momentos hermosos y nos da memoria de pez.

Malas noches de 500 horas

Hay algo que siempre me ha intrigado,¿cómo es posible que cuando no puedes dormir las noches sean taaaaan largas? Pero oye, como caigas rendido en brazos de Morfeo, es como pestañear y ya es de día. ¡Es totalmente una injusticia! A mi que me digan donde he de reclamar, porque no lo veo normal.

Hoy al pequeño malito y la mini amazona exigente, se ha unido solidariamente mi hijo mayor con pesadillas, toda una orquesta sinfónica para no dormir.

  (YO RECIÉN LEVANTADA HOY)

Cada hora equivalía como mínimo a 10... Pero alrededor de las 6 de la mañana, cuando mi cuerpo y mi mente pedían a gritos algo de absoluto descanso, se alinearon los astros y reinó el silencio y la calma en mi hogar. Fue entonces cuando mi cama se convirtió en algodones esponjosos y suaves (o al menos así los vi yo) perfectos para un sueño reparador y caí con el efecto Nancy (posición horizontal y ojos cerrados) absolutamente k.o. En ese instante mi reloj se empezó a reír de mí, o a sonar la alarma una de dos.

Creo que hay alguien por ahí escondido que maneja con una palanca el sol y en cuanto me ve dormir ¡Zas! la acciona para reirse de mí. Igual lo graba y hasta tiene un top ten de todas esas veces que nos joroba el sueño.

Sea como sea, al fin acabó la noche y mis ojeras y yo ya somos muy amigas desde que nació la pequeña amazona, así que nos levantamos, nos arreglamos un poquito y a por el día, que remedio...
Eso sí, ¡a Dios pongo por testigo, que ésta tarde caerá una siesta!

Palabra de abuela

Cuando tenemos un bebé, nos morímos de ganas porque empiece a hablar y saber como será su voz. Pero madre mía..... cuando empiezan NO PARAN. De pronto ese pequeño bebé comienza un dialecto extraño, pero que curiosamente entendemos, hasta que de la noche a la mañana, desearíamos que tuviera un botón de apagado o volumen incorporado, pero no.... Ese pequeño parece que ha guardado todas las preguntas curiosas en su memoria para soltarlas de golpe y porrazo durante una larga etapa.

Van creciendo y los diálogos con ellos cada vez son más escuetos y sus preguntas más comprometedoras. Es entonces cuando más atención debemos prestarles, porque necesitan ser escuchados.

Consejo de Santa-abuela: ¡Escucha a tu hijo! Todo lo demás puede esperar.

Con la rapidez con la que vivís, se os acumulan mil tareas y soléis dejar para el final las verdaderamente importantes. Lo primero en la lista debe ser escuchar a vuestros hijos en lo que os necesiten, porque sus inquietudes van creciendo con ellos y si lográis que cuenten con vuestra opinión siendo niños, cuando sus dudas son si pintar de verde o azul un dibujo, lograréis que en el transcurso de sus vidas, os busquen para desahogarse, para ser aconsejados y escuchados. El diálogo padre e hijo se cultiva desde pequeños, no podéis pretender que un adolescente os busque para charlar si ese momento de diálogo nunca ha existido, porque las mil y una tareas lo ocupaban todo.

En estos tiempos donde todo el mundo quiere hablar y nadie escuchar, debéis ser ese pilar para ellos. Conversar es vital para su futuro y su formación como ser humano.

No esperéis a mañana, ¡os necesitan hoy!

Palabra de abuela.

Misión, colocar el arbolito

¡Conseguido! el árbol de navidad ya está en su respectivo lugar.

La idea inicial era poner música navideña para entrar en ambiente y con los peques reír y charlar en paz y armonía entorno al árbol mientras colocamos sus respectivas bolitas, pero..... eso era ser muy optimista. Fueron varios los obstáculos que nos impedían agilizar la puesta en marcha del ambiente navideño. Aquí os relato como pusimos el arbolito de navidad en 7 "sencillos" pasos.

Paso 1. Rescatar del fondo de un rincón del armario que está bajo una cama, todos los complementos decorativos.

Paso 2. Sacar todo sin que los niños empiecen a coger cosas y dejarlas por cualquier sitio.

Paso 3. Intentar poner música navideña que sea divertida y no agobie (ya lo sé, eso es imposible)

Paso 4. Abrir el árbol....INTERRUPCIÓN DE LA PEQUEÑA...Toca comer.... Papá sigue la labor.

Paso 5. Niña K.O durmiendo en su cuna. Empezamos a colocar las luces.... INTERRUPCIÓN POR PELEA DE HERMANOS.... Se despierta de nuevo la peque.

Paso 6. Se ha vuelto a dormir. Papá colocó las luces, tocan los adornos.... INTERRUPCIÓN POR, ¡MAMI TENGO HAMBRE!.... Como lo dijeron a voz en grito, despierta otra vez la niña.

Paso 7. Papá solucionó la cena y yo tengo a la pequeña de nuevo en brazos de Morfeo. ¡¡¡A por los adornos del árbol!!!

¡¡¡¡Finalmente arbolito terminado!!!! 

Con niños lo de que "del dicho al hecho, va un trecho", se queda corto, pero los padres somos productores de esperanza e intentamos no perderla y con estas cosas más, porque nada de esto tiene sentido sin nuestros hijos.

Puesta en marcha la operación navidad, ya no hay vuelta atrás. ¡Santa! si estás por ahí y me lees te pido un botón donde pueda bajar el volumen de voz a mis hijos y un mayordomo que se ocupe de todo para yo poder familear más.

Navidad es compartir

A nuestra tribu simplemente ¡NOS ENCANTA LA NAVIDAD! Y no precisamente por el espíritu consumista, sino por la magia e ilusión que le ponen los niños.
Mis chicos ya no son tan niños y sospechan de todo, pero creo que nos siguen el juego por el entusiasmo con el que nos ven o quizá por miedo a descubrir el pastel y se acabe el chollo, sea como sea, cuando en casa hablamos de Papá Noel o los Reyes Magos, ellos asienten y callan con cara pícara.
Pero este año, la navidad viene con toda la energía renovada a este hogar de la mano de la pequeña amazona, que descubrirá por primera vez la magia de las luces, la música y por supuesto los regalos.

Es complicado no sucumbir ante tanto anuncio de "bi-bi-zak", pero hay que intentar que nuestros hijos vean más allá. Regalar a otros niños los juguetes que ya no utilicen siendo seleccionados por ellos mismos, es una buena idea para que sean conscientes del valor de compartir y reutilizar.


Todo el año es el momento perfecto para familear, pero navidad tienen un sabor especial, los niños están de buen talante intentando arreglar las travesuras de todo el año en dos días, para camelar a sus majestades y que no sólo les traigan carbón.
Aprovechando esa predisposición de enmendar las rabietas y locuras anteriores, podemos hacer una manualidad para decorar la navidad. En la guía infantil nos proponen ésta, que es secilla y bonita para pasar una tarde famileando, ¿os animáis?

El valor de las palabras

En una tarde con peques se pueden escuchar unas 50 veces... ¡MAMI MÍRAME! Por motivos diversos. A los 10 primeros respondemos en el acto, los 10 siguientes es como, ¡si cariño, muy bien!.

los otros 10, si si si... ahora te miro. Pero las últimas 20 veces..... ¡PERO NIÑO!..... dícelo a tu padre, que a mi me tienes frita.

Responder manteniendo la cordura después de estar oyendo en bucle la misma cantinela, es harto complicado, pero debemos "morir en el intento", si es necesario.

Las palabras son muy poderosas, y según las utilicemos, podemos motivar o frustrar, a nuestros hijos.

Como padres queremos hijos equilibrados e inteligentes, pero sobre todo FELICES. Así que dad valor y potenciar las maravillosas cualidades de vuestros hijos y no dejéis para mañana los besos y abrazos que les podáis dar hoy. Casi cualquier discusión puede terminar entre cosquillas o un buen abrazo.

Aquí os pongo una ayudita de la ETAPA INFANTIL, donde nos hablan de frases negativas que debemos evitar con nuestros hijos. 

Salir con hijos: la prueba definitiva.

Desde que hay un bebé en casa, planificar cualquier salida es toda una odisea, ya sea un recado, la compra, lo que sea, es todo un proceso. Si a esto le sumamos dos hijos más que no paran un segundo, salir es casi tan complicado como preparar una expedición por la selva amazónica, quieres llevar todo lo que necesitas, pero sin exagerar. El bebé casi necesita una maleta de mano, porque si no es cambio de pañal, es un vómito, si se aburre quiere un juguete, chupete de repuesto... y lo peor es que por mucho que pongas en la bolsa, siempre sientes inseguridad pensando que olvidas algo.

A los mayores es muchísimo más fácil prepararlos, pero es que cuando ellos llegan al super, por ejemplo, se vuelven unos consumistas natos.
Mis chicos me intentan convencer de comprar cualquier cosa. El pequeño de 7 años, le da lo mismo comprar un detergente que vió por la tele, que un bote de judias... ¡LO QUE SEA! pero comprar, comprar y comprar. El drama se va viendo venir cuando a la mayoría de peticiones le decimos que no, pero es que sencillamente no creo que necesitemos arena para gatos, teniendo un perro.

Entonces llega el tan temido momentazo...

A viva voz suelta: 

-¡Pero es que no me compráis nada!  ¡Sois malos!

A lo que intento hacerme la loca para no desatar a la niña del exorcista que llevamos dentro todas las madres, si si... TODAS tenemos una que desea salir cuando la paciencia es nula y el cansancio nos puede. 

Madres y padres, no estáis sólos, todos pasamos por lo mismo. No sintáis remordimiento por las miraditas de la señora de turno, si hay que decir NO, es NO y que Dios os coja confesados....
Eso sí, recordad esos momentos incómodos que os hacen pasar, porque si algún día deciden ser padres... ¡TACHÁN! Seguramente el karma hará su trabajo.

Palabra de abuela

Si despiertas por la mañana entre risas estridentes, correteos por casa entre ji-jis y ja-jas y vas recogiendo colores y legos en un bucle sin fin...¡ENHORABUENA! ¡Eres padre/madre!
Los hijos tienen baterías interminables y con tiempo de recarga mínimo. A consecuencia de esto, en casa siempre hay barra libre de café y chocolate para aguantar el tipo.
El 99,99999% de los padres, creemos que nuestro hijo es un huracán agotador y en ocasiones los tachamos de "bichitos" perturbadores.

El consejo de la santa-abuela: Si no quiere todo lo anterior... ¡Cómprese un florero!

Nada más allá de la realidad, los hijos son alegría, son vida... Lo llenan absolutamente todo con su energía, son un regalo que trae consigo la responsabilidad de unir tu vida a la suya para siempre, pero ¿quién no quiere una vida con besos pegajosos con sabor a chocolate y travesuras que te quitan el aliento?
Con el paso de los años, nos volvemos más sosegados y precavidos, se podría decir que algo aburridos y queda muy atrás todo ese envoltorio recubierto de magia y locura que tienen los niños. Por ello, como abuela, me gustaría que alguien me hubiera aconsejado no enfadarme tanto por esa espontaneidad infantil, reír con ellos en sus descubrimientos (por muy descabellados que parecieran) porque es la oportunidad de volver a la niñez.
Ahora como abuela, tengo la experiencia de los años, y esos años los aparco cada día para volver a ser una niña con mis nietos. Sed niños con vuestros hijos y disfrutareis muchísimo más de la gran experiencia de ser padres.

Palabra de abuela.

El manejo de la frustración

¿Puedo jugar a los videojuegos? ¿Podemos ver videos del youtube? No sé en vuestra casa, pero en esta tribu son preguntas recurrentes día sí, y día también. Las nuevas tecnologías no tienen nada de malo, si se usan con responsabilidad (lo que para mis hijos sería toooooooooooda la tarde de cada día) Respirar hondo y repetir los mil y un motivos por los que no pueden permanecer horas frente a ninguna pantalla, se convierte en una agotadora lucha verbal. Luego intentan negociar haciendo alguna tarea a cambio de tiempo tecnológico, a lo que les proponemos algún quehacer imposible para que desistan y entonces, la frustración se apodera de ellos. Manejar la frustración deberían ser asignatura obligatoria, nos evitaría unos mil dolores de cabeza a los padres y la vida famileando sería más fácil.

Como hasta el momento, no es tema en las escuelas, nos toca a los padres recopilar información y ayudarlos (y ayudarnos) para que se conviertan en adultos equilibrados.

Del manejo de la frustración nos hablan en LA GUÍA INFANTIL, porque un hogar apacible, es posible.

Chip de padres

Cada vez tengo más clara la idea de que desde que nacemos, llevamos en los genes un chip ahorrador, pero que éste hiberna (en la mayoría de los casos) hasta que nos convertimos en padres, que es cuando despierta de su letargo.
En nuestro caso, siendo familia numerosa, todos los consejos para ahorrar, son una posibilidad a probar, desde detergente casero (he de decir que es tremendamente eficaz) hasta reciclar o customizar la ropa, para que de un hermano a otro pueda ser reutilizada.
En AHORRADORAS nos dan 16 formas de conseguir ropa económica para niños, sin poner a tambalear la economía familiar.

Ha llegado el frío

Ahora sí que se va notando la llegada de la navidad. El viento frío, las calles mojadas y una alfombra de hojas por todas partes. Toca empezar a sumar capas de ropa. Mis chicos como siempre están en movimiento, no necesitan tanto abrigo, con camiseta, abrigo y bufanda al estilo ninja, ya están apañados, pero en cambio a la pequeña sólo se le ven los ojitos y para colmo de males, lleva fatal lo de ponerse abrigo, es que parece que el abrigo la absorbe y acaba siendo más ropa que niña.

Con este frío, lo mejor para terminar el día es famileando en casa con un chocolate calentito y bajo la atenta mirada de nuestra fiel compañera de 4 patas, no hay mejor calefactor portátil que ella.

Nuestra compañera perruna

Os dejo un cuento que habla de las estaciones, para familear con vuestros peques. ¡Que lo disfrutéis!

CAMBIO DE ESTACIÓN

Larisa había nacido en septiembre, la madrugada en que el verano y el otoño se daban la mano. Por eso, por ser una niña a medio camino entre el sol y la lluvia, Larisa era alegre y resplandeciente, pero también pensativa, nostálgica y a veces un poco llorona.

A Larisa le gustaba tostarse al sol y pasear bajo la lluvia. Le gustaban los helados y las sopas calientes, las mantas a cuadros y los bañadores de volantes. El calor y el frío. El verano y el otoño. Septiembre.

Por eso, el año que Larisa cumplió 8 años recibió un regalo muy especial. No creáis que se lo hizo mamá, ni papá, sino el viejo vecino del primero. Se trataba de una bola de cristal con una ciudad en miniatura dentro.

Una bola mágica hace cambiar las estaciones del año

- La ciudad que hay dentro es la nuestra. ¡Agítala!

Y al hacerlo, Larisa observó sorprendida como la ciudad no se llenaba de nieve sino de una lluvia de hojas de colores.

- ¡Es preciosa! Muchas gracias.

- No es solo preciosa. También es mágica.

- ¿Mágica?

- Claro. Es la bola de los cambios de estaciones. Solo alguien que haya nacido entre una estación y otra puede tenerla.

- ¿Y qué puedo hacer con ella? – preguntó con incredulidad Larisa.

- Utilizarla con inteligencia. Cada vez que agites tres veces seguidas esta bola, cambiará la estación.

Larisa agitó tres veces la bola y observó maravillada como las pequeñas hojas de colores cubrían la ciudad en miniatura. De repente un fuerte estruendo la asustó.

- ¿Qué ha sido eso?

- Una tormenta. Va a empezar a llover.

- Pero si hacía un sol impresionante. ¿Cómo es posible?

- Porque has agitado tres veces la bola mágica. Esta bola controla las estaciones y ahora tú eres su guardián.

- ¿Yo? Pero si solo soy una niña…

- Pero solo las personas que nacen entre estaciones pueden tenerla. Yo nací entre el invierno y la primavera y tú entre el verano y el otoño.

- Está bien. Yo guardaré la bola mágica. Solo la agitaré tres veces cuando cambien las estaciones.

Y así lo hizo. Cada tres meses, en todos los cambios de estaciones, Larisa cogía su bola mágica y la agitaba tres veces. Entonces, contemplaba emocionada como el cielo cambiaba de color y daba paso a una nueva estación. Del otoño al invierno, del invierno a la primavera, de la primavera al verano, del verano al otoño y vuelta a empezar. Un año. Y otro. Y otro. Y otro…

Las estaciones fueron pasando y Larisa se acabó convirtiendo en una anciana despistada a la que poco a poco se le iban apagando los recuerdos. Primero olvidó dar de comer a su gato, y el pobre tuvo que buscarse otra dueña. Luego se olvidó de pagar los recibos de la luz y acabó viviendo a oscuras. Por último, se olvidó de aquella bola mágica que cambiaba las estaciones.

Y así ocurre ahora: el tiempo es un caos. Un día llueve y al siguiente hace un calor terrorífico. De repente viene el frío invernal y al momento corre un delicioso viento primaveral. ¿No os habéis dado cuenta?

Es la vieja Larisa que agita tres veces su bola mágica sin saber muy bien para qué. No recuerda nada. Solo sabe que espera a alguien que haya nacido entre una estación y otra.

Un niño o una niña que sea mitad primavera, mitad verano. Mitad otoño, mitad invierno. Algo así…

Cuento a la vista
María Bautista y Raquel Blazquez
Escritora e ilustradora
Blog de cuentos infantiles
Cuento a la vista

Plan de sábado

Mañana sábado, es el mejor día para despertar a las 7 de la mañana con muchas ganas de jugar, al menos eso piensan mis peques. En semana las sábanas creo que los atrapan con alguna llave de judo, porque es misión imposible despertarlos. A menos que oigan a la pequeña amazona cantando, en ese caso a correr a por ella, porque en casa otra cosa no.... Pero amor hermanil por la pequeñita, hay a raudales.
Aquí os pongo un plan interesante para mañana, cuentacuentos en la libroteca del gato de Cheshire. Moustache es un gato muy curioso, pero esa curiosidad le hizo perder sus bigotes, ¿cómo lo solucionará....?

¡¡¡Ya hay plan para familear!!!

Cargando paciencia......

Con una tribu numerosa, cada uno busca su sitio a su manera. Mi chico mayor de 11 años, lo hace siendo un rebelde sin causa, el pequeño de 7 años, a base de dosis de mucha ternura aderezada de besos o a voz en grito, según le de el aire y la pequeña guerrera amazonas de 5 meses, como es la última en llegar al clan, no pierde ocasión para hacerse notar, sea la hora que sea... Creo que por las noches piensa así:

• Las 3 de la mañana, pues que bien, es el momento perfecto para tener una charla con mi mami...
• Mmmm hace mucho que no veo a mis papis... ¡PAPI!, ¡MAMI! ¿Dónde estáis?, no vaya a ser que se olviden de que estoy, voy a cantar un rato... como para disimular.
• ¡Suena el despertador! ¡que suerte la mía! Tengo las pilas cargadas a tope... ¿que haremos hoy? estoy tan contenta que me levantaría de un salto... pero aún no domino este cuerpo....¡que rabia! Pues nada.... lloraré.

(ASÍ DUERMO CADA NOCHE, UN RATITO PARA CADA OJO)

Su repertorio varía durante el día, que se vuelve creativa e improvisa. 

La paciencia en ocasiones escasea por estos lares, pero siempre buscamos la manera de encontrar un rinconcito donde recargarla. A mi me sirve un laaaargo baño mientras papá se ocupa de todo, o un poco de música danzando como las locas con los peques (muy recomendable para eliminar el estrés)

Y vosotros ¿Cómo recargáis energía y paciencia para pasar el día?

S.O.S. Adolescencia en proceso

Hay una amenaza acechando en la puerta de nuestro hogar, día sí y día también hace acto de presencia y se apodera de mi hijo mayor. Entonces una de mis mayores preocupaciones desde su nacimiento, entra a irrumpir embistiendo contra todo y todos. Con un pequeño rebelde sin causa en proceso, sólo nos queda cruzar los dedos y que dios nos coja confesados, al fin y al cabo es nuestro y lo queremos.

De buenas técnicas para ayudar a nuestros pequeños, nos habla este artículo de Desarrollo del Talento. Interesantes consejos para críar a nuestros adultos del mañana. 

Se acerca la Navidad

Aquí llega como cada año fiel a su cita, el anuncio de lotería, así que es oficial ¡llega navidad!
Por estas fechas siempre me entra un cúmulo de sensaciones, me apetece llorar y reír al mismo tiempo. Entre el trabajo que supone remover la decoración con todos sus accesorios y el tema regalos uffff, pero que ideal queda todo y es una excusa estupenda para reunir a la familia.
En casa ya nos vamos aprovisionando de los reglamentarios catálogos de juguetes, imprescindibles en estas fechas, con tanto donde elegir hay que tomarse su tiempo.
Os dejo el anuncio de lotería, que personalmente ¡me ha encantado! Este Justino, se lo ha ganado.

Tarde de peli y manta

¿Qué puede haber mejor que acabar la semana con peli y manta? Pues acabarla además famileando, eso sí, no sin la interrupción en Do mayor de la peque de mi tribu, pero la vida es así...
El mejor regalo para los hijos sin duda es el tiempo en familia y en este caso, se aplica la ley de más vale calidad que cantidad, así que a disfrutar el momento.